El hotel está excelente, tienen muy buen servicio. Desde que llegamos nos recibieron de maravilla, por mi cumpleaños pusieron globos en la habitación y nos tenían un pastelito de bienvenida delicioso.
El SPA está muy bonito, cómodo y excelente sauna, vapor, alberca y jacuzzi tood súper.
Un día cenamos en el restaurante del hotel y todo delicioso.
La host del restaurante Daniela muy amable y atenta siempre en la cena y en los desayunos.
También la señorita del área de Concierge muy amable, nos orientó que hacer en St. Moritz.
Todo el personal muy amable
Sin duda Me vuelvo a quedar cuando vuelva a ir a St. Moritz.