El equipo de aire acondicionado de la habitación hacía un ruido terrible. Al apagarlo, se empezó a sentir un golpe como de martilleo, regular. Era tarde y mi compañero ya dormía, por lo que no avisé a recepción. A la mañana me dijeron que sí, que ya sabían que un aire acondicionado de una habitación de un piso de arriba, chorreaba agua que golpeba en el aire de nuestra habitación. Lo sabían, no lo habían resuelto, y me dieron esa habitación de cualquier manera. No fue una noche de buen descanso, la verdad.