Un hotel muy bueno y barato en Covilhã. Incluye desayuno y aparcamiento, aunque esté último es en una explanada sin asfaltar ni vigilancia. En contra de lo que dicen algunos comentarios, hay espacio de sobra para aparcar. El hotel está renovado y las habitaciones y las camas son bastante amplias y cómodas.
Lo que no me gustó es que tiene sauna y baño turco pero no funcionaban y no tuvieron ni un detalle por las molestias. Ni si quiera una disculpa. En el desayuno se echa en falta algo más de variedad y, sobre todo, productos locales.
El hotel está muy lejos del centro y es una ciudad de montaña: las cuestas son frecuentes y muy empinadas. El bus es caro y para aparcar en el centro hay que pagar, pero el coche se hace imprescindible si quieres explorar la Sierra de la Estrella y las aldeas históricas: Castelo Novo y Belmonte están cerca. Cerca hay un centro comercial con múltiples opciones para comer, no hace falta ir más allá ni al Meliá que te mandan donde el menú cuesta 25€ más bebidas.
En resumen, como opción económica y buena cumple.