Quiero ser justo, el lugar impecable, precioso y lleno de vida, pero yo llego mal acostumbrado, quizas la falta de algunos detalles sea intencional, el objetivo de mi mensaje es que este llegue a todos los auditorios y que este sea positivo.
Faltan el " par de almohadas por cama ", tetera o cafetera para el gusto de poder preparar un café o un té en tu habitación a la hora que quieras si tener que pagarlo o explicarle a nadie como te gusta.
Sin lugar a dudas, un lugar que vale la pena conocer y disfrutar cuando menos un día.
El personal en la recepción y barra; profesional, atento... perfecto.